1. Tanto ir el cantaro...


    Fecha: 01/02/2023, Categorías: Confesiones Tus Relatos Autor: Carli, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    Siempre tuve suerte. A mis relaciones pasajeras o de cierta duración, de alguna forma pude convencerlas de entregar "el chiquito". No todo es mérito porque las he tenido dónde me ofrecieron "la entrada de emergencia" sin pedirla.
    Algunas situaciones fueron Increíbles. Un caso fue una chica mormona que salíamos en secreto porque al no ser mormón yo, no deberíamos vernos.
    Tuvimos sexo de la primera vez y fueron tres encuentros, que en último me entrego su "preciado tesoro".
    Otra situación que recuerdo es un pibe más chico. Un día después de un partido de fútbol en el barrio, se vino a casa y estando solos me entrego su "entrada posterior". El era gay, solo que se enteraba ese día. 
    Una Compañera de trabajo, casada que jugando y jugando, cuando fuimos al hotel ya me había jurado que le entregaría el agujerito sin fin, y cumplió con creces. Dos buenos polvos nos dejaron a mi sin leche y a ella con el culo abierto
    A Gero lo conozco hace un tiempo, está casado pero es bi
    Todo salió a la luz un día que salimos a cenar sin parejas. 
    Terminando la cena estábamos calientes y entramos a un hotel por horas.
    Le chupe la pija y el a mi, luego lo coji con ganas por un buen rato hasta acabar... Fue grandioso
    Repetimos dos veces, pero y si todo tiene un pero.
    Una de esas veces que se sucedían cada mes y siempre terminábamos en el hotel con Gero entregando el rosquete.
    Esa vez que recuerdo por tramos, ya que sucedió naturalmente ya al entrar me besó la boca y nos desnudamos uno al ...
    ... otro, nos amamos por turnos, nos frotamos las pijas mutuamente y sin saber cuándo, me encontré boca abajo y con Gero encima mío.
    Me la fregó un poco y apoyando el peso de su cuerpo con una mano en medio de mis omóplatos y con la otra manipulando su verga caliente y dura en la entrada de mi culo.
    No podía reaccionar, estaba entregado. La fue empujando y cuando me entraba, pese a que traté de aguantar el dolor, me quejé varias veces y resoplaba tratando de resistir esa invasión a mi culo hasta ese momento virgen.
    Me la metió hasta el fondo. Sentí que me llenaba por completo pero ya había pasado el dolor y el ardor, y me empecé a relajar.
    No me resultaba tan malo y la suave presión en mi prótasta me empezaba a dar un fuerte calor interno y su cuidado movimiento me llenaba de placer.
    Dejé de quejarme y bufar para empezar a gemir de gusto a cada metida
    Me supo llevar a entregar el orto, y gustoso disfrutar de esa verga caliente y dura que se me metía hasta el alma
    Me cojió por un buen rato, y ya me movía yo también buscando que su pija me siga entrando más aún y casi necesitando su leche adentro que se le fuera hinchando más el grosor me hacía delirar de placer
    - Cojeme mi amor, coje a tu puta, me escuché decir totalmente entregado a su embate
    Se apuro más y cuando me la enterró hasta el fondo supe que me iba a llenar
    Me abrí sin pensar esperando su regada interna y sucedió
    Me estaba comiendo por el culo y tan puto como podía, una verga gorda que me estaba preñando a ...
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