1. Tomando el control.


    Fecha: 28/12/2022, Categorías: Dominación / BDSM Tus Relatos Autor: AlexKing, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... entre sus piernas. Empecé a lamer su coño con una mezcla de suavidad e intensidad que pareció encantarle. Usé todos los trucos que conocía para hacer que gimiera de placer. En diez minutos estaba arqueando la espalda y disfrutando de su primer orgasmo. Un par de minutos más tarde estaba temblando por otro. Y yo disfrute cada uno de los segundos saboreando su coño.
    
     
    
    “Wow”, dijo, “Tenías razón cuando dijiste que me ibas a conseguir, tras esto quiero ser tuya. Ahora veamos que puedes hacer con tu polla”.
    
     
    
    No tardó ni un segundo en agarrar mi polla y guiarla hasta la entrada de su coño. Sus ojos se abrieron como platos y gimió con fuerza cuando la metí de una sola embestida. La deje dentro de ella unos instantes para que su coño se adaptara al tamaño. Cuando pareció sentirse cómoda con mi polla dentro, lo saqué completamente y lo volví a meter con fuerza. Mantuve este patrón durante varios minutos aumentando gradualmente la velocidad, hasta que finalmente la estaba follando con toda mi energía. Agarré sus manos y las sostuve sobre su cabeza para tener un mayor control.
    
     
    
    “Oh joder, oh joder, oh joder” repetía una y otra vez como una especie de mantra. "Destrozame el coño, hazme tu perra, hazme tu puta".
    
     
    
    Después de unos quince minutos intensos, pude sentir como me acercaba al climax. "Me voy a correr", le dije.
    
     
    
    "Llename." Gimió. Con eso exploté dentro de ella. Bombeé cada gota de semen que tenía en el fondo de su coño. "Dios mío, ha sido ...
    ... increible", jadeó mientras se la sacaba despacio. “No esperaba tener sexo esta noche pero me has hecho sentir tu perra y disfrutar. ¿Te gusta tomar el control?
    
     
    
    "Sí." Respondí: “Nada es tan excitante como hacer que una mujer se someta a mi. Pero me gusta ir despacio en estos encuentros casuales. Nunca se sabe realmente hasta donde puedes llegar en estas situaciones”.
    
     
    
    Empezó a vestirse "Bueno, podríamos llegar hasta mi casa y allí podría someterme más a ti". Dijo mientras evitaba mi mirada con timidez. “Suelo tomar un papel muy sumiso en la cama. De hecho, echo de menos que un hombre dominante me controle y domine”.
    
     
    
    "En ese caso, perra, dame las llaves del coche y siéntate en el asiento del pasajero". Sus ojos se iluminaron con mis palabras y en pocos minutos estábamos en dirección a su casa. Le agarré fuerte del pelo y empujé su cabeza hacia abajo, directa a mi regazo. Sacó mi pene que se estaba endureciendo rápidamente y comenzó a meterlo en su boca como una verdadera profesional. Usé el GPS del coche para llevarme directo a su casa y que así su boca no tuviera que dejar mi polla ni un solo instante
    
     
    
    No vivía muy lejos y pronto estábamos entrando en su garaje. Me guió por la casa y le detuve en la sala de estar. 
    
     
    
    “Ahora desnúdate para mí, esclava.”
    
     
    
    “Sí, señor”, fue su respuesta inmediata. Agarré su mandíbula y le obligué a mirarme a la cara.
    
     
    
    "Sí, amo", le dije con severidad. “Te referirás a mí como amo, ¿entendido?”.
    
     ...