Le puse los cuernos a mi esposo con su propio tío - Relatos Eróticos

Le puse los cuernos a mi esposo con su propio tío

Hola soy Dayana, soy de talla pequeña, por allí de 1.54 mt, soy de tez blanca, cabello negro a los hombros, ojos grandes y cafes, mis bubis no son grandes, pero dios me regaló una colita grande y redonda que hace voltear hasta los hombres más recatados.  Soy cachonda hasta donde recuerdo, me gusta el sexo y sus variantes.  Me casé joven, a los 19 años, tuve un hijo a los 20, ahora tengo 23.  Mi esposo ha trabajado en una empresa, él no es profesional, así que lo han enviado a diferentes provincias y yo le he seguido fielmente.  La última vez lo enviaron a un lugar (que no puedo decir su nombre, perdón),  y en ese lugar vive un tío, que yo no conocía, que llamaré Roberto, de unos 40 años.  El tipo es bien parecido y robusto, bastante símpatico, que llegaba a nuestra casa a cenar repetidamente, pues nos ha ayudado, incluso le prestó un auto a mi esposo para movilizarnos, ya que no teníamos.  Luego nos alquila una casa donde vivimos donde pagamos casi nada de renta.  De todo eso bueno, también el tío Roberto le llamaba la atención mi colita redonda, incluso me miraba con ojos de lujuria frente a mi marido, y el nunca le dijo nada.  Al principio me molestaba su actitud, pero como mi marido era pasivo a eso, me empezó a dar morbo y en ocasiones me ponía unas mini apretadas, cuando sabía que el vendría a cenar.  Al verme puedo jurar que se frotaba la verga debajo de la mesa al verme así.  El tío Roberto era divorciado, así que no tenía horario.  Luego comenzó con muchas ...

... atenciones a mi persona, me llamaba a la casa preguntado si estaba bien yo y mi niño, o si me faltaba algo ya que pasaría al supermercado, o me compraba algo personal para mi.  Eso me fue ganando del tío, pues siempre pensando en mi.  Hasta intervenía a mi favor cuando peleabamos con mis esposo.  Tuvimos dos emergencias en la casa (mi niño enfermo y yo enferma) y él fue quien nos llevó al hospital de noche, mi marido no estuvo en ambos casos. 

Una noche como agradecimiento de tantos favores, le hice una cena especial y sucedió que mi esposo me avisó de último momento que no estaría, pues sus compañeros de la promo de la prepa se reunirían y no quería faltar.  Yo me molesté y sabía que eran reuniones mucho licor y posiblemente en un table dance.  Decidí no suspender la cena, es más me puse la ropa más sexy que tenía, me puse una mini ajustadísima a mis caderas y mi trasero, era tan corta que si me agachaba un poco podrían ver las diminutas bragas que me había puesto.  Me puse una blusa con mucho escote, aunque mis senos no son grandes, pero si paraditos y duritos, y unos zapatos de tacón alto, me perfume bastante y esperé la llegada del tío Roberto.

El tío llevaba en la mano una botella de vino fino.  Le abrí la puerta y vi en su rostro que me recorrió con los ojos todo mi cuerpo, me saludó y pasó adelante, preguntó por su sobrino, mi esposo, le dije que no estaría esta noche, pude ver en su mirada que no desaprovecharía la oportunidad de conquistarme.  Le atendí, cenamos, el me ...