1. No puedes pedirle a un gato que cuide un pez


    Fecha: 13/08/2022, Categorías: Infidelidad Tus Relatos Autor: yik, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    Hola soy Roberto de 32 años.  Separado.  Tengo un compadre que llamaré Samuel, casi de mi misma edad. El tiene una esposa que llamaré Silvia, con ella tienen dos hijos y lejos de ponerse fea o gorda, la condenada Silvia se puso rebuena, tiene buenos senos y dos nalgas grandes en forma redonda, con cintura, mi compadre la cela demasiado y la obliga solo a ponerse vestidos largos y flojos, pues cuando ella se pone pantalones, se puede apreciar todo ese tremendo culo que ostenta.  Pero es cierto que mi compadre Samuel no la deja un momento, casi que la atosiga y ella me ha dicho que es muy infeliz porque no tiene vida social, siempre en casa haciendo el quehacer.  Pero la vida juega volteretas y durante pandemia, mi compadre perdió el trabajo y solo tuvo trabajos temporales y malos en salario.  Llegó a desesperarse y en en febrero del 2021, decidió irse al norte, me llamó una noche y me dijo que solo en mi podía confiar a su esposa, pues ella era deseada por muchos hombres del barrio.  Y que me la encargaba, que la fuera a ver frecuentemente, le prometí que la vería mientras él estuviera fuera.
    
    Debo decir que me confieso un hombre muy cachondo, me gusta el porno y tengo una colección de vídeos porno.  Y siempre le llevé ganas a la comadre Silvia, pero por la amistad con el compadre Samuel nunca lo llevé a cabo, aunque en varias ocasiones, estando libando con el compadre en su casa, le llegué a insinuar a la comadre que me gustaba y me gustaría un revolcón con ella, la ...
    ... comadre me decía que eso no era posible, pero que a ella le gustaría también algo conmigo.  Y ahora no había nada que se interpusiera y además tenía el permiso de mi compadre de visitarla.  Así que..
    
    Apenas a los quince días de haberse marchado el compadre, había escrito por redes sociales a Silvia que ya estaba en Tijuana.  Una noche llegué a ver a la comadre, y dios mio, lo primero que vi era que se había quitado esos vestidos de vieja que mi compadre le había obligado a ponerse, tenía puesta una mini arriba de la rodilla, la comadre se miraba deliciosa.  Me invitó a cenar y yo no dejaba de verle sus buenos muslos y su lindo trasero, cuando terminamos y ella se fue a la cocina a lavar los trastos, la seguí y me puse atras y la abracé poniéndole mi paquete en sus nalgas, le dije que yo sabía que era una mujer hermosa y que tenía sus necesidades como mujer, de sentirse mujer y que yo estaba allí para apoyarla, a tiempo que le rozaba mi verga en sus nalgas, ella me dijo que si, que necesitaba un hombre en la casa, con ese permiso, le subí su mini y le bajé su diminuta braguita, como que ella estaba preparada para esa noche, pues me bajé a mamar sus nalgas, eran duras y con mucha carne, se la lamí todas, se las abrí y le comi su ojete del culo también, ella daba varios gemidos y me decía que se lo hacía rico.  Le metí dos dedos en su chuchita y ella estaba super mojada, mis sueños se iban convertir en realidad esa noche.  Le pregunté si los niños estaba dormidos, ella me dijo que ...
«123»