1. El Despacho II


    Fecha: 12/08/2022, Categorías: Dominación / BDSM Tus Relatos Autor: Arfridio, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... hiciste nada más oírme decir:
    -	¡Permiso para que te corras zorra!
    Tu mirada de agradecimiento y el temblor de tus piernas, que te duró unos momentos, te hicieron sentirte muy especial. Al poco de que te relajaras, te ordené:
    -	Inicio, pero mírame a los ojos y por nada del mundo se te ocurra parpadear. Ahora soy yo el que se va a masturbar y correrme en esa cara que me pertenece.
    Dos guantazos, uno en cada mejilla, hicieron que tu cara se pusiese colorada. Yo me masturbé, y tú obedeciste fielmente sin apartar tu mirada de la mía. Acerqué mi polla a tu cara y te premié con una descarga que restregué por toda ella. Las pequeñas gotas de agua mezcladas con mi semen, te daban un aspecto de zorra sumisa, que pondría cachondo a más de un conocido nuestro.
    -	Mantente en esa posición, voy a inmortalizar el momento.
    Te saqué varias fotos más, para mi álbum personal, en varias posiciones y con distintos planos. En esa postura, cogí el collar de paseo y te lo coloqué:
    -	Ahora mi sumisa, cuando tire de ti, saldrás a cuatro patas de la ducha.
    Tiré y empezaste a pasear al lado de tu amo, te hice que pasearas alrededor mía unas cuantas vueltas, te di paseos por el baño, observando como balanceabas tu cintura, y al mismo tiempo, tus pechos chocaban entre sí, y bailaban al ritmo del paseo. Te detuve, y te ordené:
    -	Tu cara contra el suelo, quiero ver esas pinzas presionar tus pezones contra el suelo, y levanta tu culo. 
    Te costó ...
    ... un poco, pero enseguida adoptaste la posición que yo quería. Sabías complacer a tu amo.
    -	Ahora, sin despegar la cara y los pechos del suelo, ven hacia mí.
    Yo me retiré de ti y te grabé en video. Te costó bastante, pero yo estaba seguro que no me ibas a defraudar.
    -	¡Eso es! Mi zorra, restriégate por donde yo piso, y ahora ven y adopta tu postura de inicio. Quiero que me seques con tu lengua, lámeme entero, mis pies, mis huevos, mi polla, labios…. ¡Todo!
    Aún sigo corriéndome cuando visualizo el video en mis momentos de privacidad.
    Cuando terminaste, te indiqué la nueva posición, Paseo, y te llevé a mi cuarto. Allí te postré al lado de mi cama y te ordené:
    -	Ése será tu lugar, en el suelo junto a tu amo, no tendrás derecho a subirte a la cama, al menos que yo te lo ordene. No se te ocurra mojar el suelo, si te meas, te aguantas, si te masturbas, ni una gotita quiero ver, si tienes sed, te jodes. Yo decidiré todo por ti, y tú simplemente, obedecerás. Lo sé, a mi perro lo trato mejor que a ti, pero tú estás por debajo de él.
    Te esposé las manos detrás de la espalda junto a los tobillos de cada pierna, y te até a una de las patas de la cama. Retiré el gag de tu boca, pero te dejé el plug para que tu ano se fuera acostumbrando.
    -	Buenas noches, mi zorra sumisa, descansa, pues al despertar me darás los buenos días con una felación bien húmeda.
    Y te di una bofetada y cinco bastonadas, para terminar el día.
    [Continuará] 
«12»