Beso de tre con madre e hija - Relatos Eróticos

Beso de tre con madre e hija

Nunca me pasó por la mente llegar a coger con mi amiga Heidi, mucho menos con su mamá, de nombre Gela.
Resulta que mi amiga que esta conmigo en la compañía de seguridad donde trabajo y como nos llevabamos bien me invitó a una boda por rumbos de su casa. Aunque mi amiga tiene un cuerpo antojable siempre tuvimos relación de compañeros. Hasta ese dia que por cierto ya tiene un buen que sucedió.
Su madre una señora en toda la extesión de la palabra, muy alegre ya para sus cincuenta y tantos tiene un atractivo muy especial, su trasero, muy paradito y con sus caderas anchas, mismo que fue heredado acertadamente a mi amiga.
Durante la boda todo transcurría normal,pero me ponía nervioso cuando ella se acercaba para decirme algo, debido al ruido de la música, yo aspiraba su aroma olía muy rico y me ponía a mil. No se si se daba cuenta de eso o disimulaba pero estaba muy sonriente.
Cuando llegó el protocolo de la "víbora de la mar" , mi amiga alentaba a su madre para ir, ella no quiso y terminó pasando mi amiga con las demás invitadas. Seguía más nervioso estar con la señora porque al platicar empezamos a reir y "sin querer" me toco la pierna, además de que nuestras bocas quedaron muy cerca . Ni con Heidi había tenido tal osadía, por fortuna la letanía de la "vibora de la mar" así como en todas las bodas la hicieron de emoción (como decimos en México).
Eso nos dio oportunidad para atrevernos a hacer algo más excitante y audaz : rosamos ligeramente nuestros labios, y cuando voltee ...

... para la pista de baile y ver que no iniciaban el juego, la señora se me desapareció.
Para mi sorpresa se había metido debajo de la mesa, y aprovechando que estabamos hasta el fondo y alejados a la vista de todos , al menos eso creemos, ella bajó el cierre del pantalón y liberó mi falo, que ya estaba muy firmes.
La señora me regaló la chupada más rica que jamás imaginé recibir de ella, solo me dejé querer.
Lo que me preocupaba era que mi amiga volviera a la mesa. No pude contenerme y solté mi chorro de leche el cual por su puesto fue succionado por la mamá de mi amiga. Con mucha paciencia estuvo limpiando con su legua desde mi glande hasta el tronco, cuando pensó que ya estaba totalmente limpio salió de su escondite muy quitada de la pena. A mi me costó trabajo disimular las sensaciones que me producía con su boca mientras me la limpiaba.
Se limpió con una servilleta y dio un trago a su bebida muy tranquila.Yo solo me limité a observarla y cuando se acercó un mesero tal vez nos vio  por la   mirada medio pícara.
Casi enseguida mi amiga llegó a la mesa y nosotros muy disimulados. La señora se levnto al baño y aproveche para verle su hermoso trasero, ambas lo notaron pero  no dijeron nada.
Mi amiga me abrazó afectuosamente y sentí tus tetas muy pegadas a mi, pensé que no iba a reaccionar después de lo sucedido pero me equivoque. Como ya estaba  entrada en copas sin ningún tapujo palpó mi paquete. Yo me preocupe tenía miedo de que se diera cuenta de algo.
mi mente trabajo ...